Guatemala, Lunes 26 de Noviembre 2007



cuadrito CONTRAPUNTO

¡EL ROCK ESTÁ VIVO!


Edgar Rosales - Editor de Opinión
erosales@sigloxxi.com


Son notables los indicios de que se acerca una nueva etapa de oro para este popular género musical.

Parece que hay buenas noticias para los amantes del buen rock. (Y también para los del no tan bueno). Como no podía ser de otra manera, son cada vez más los expertos que le auguran una vida muy corta al reggaetón, esa especie de basura musical que los mareros han hecho suya y cuyas letras ofenden groseramente la dignidad de las mujeres.
Los más optimistas le auguran menos de un año de vida. Por mí y por muchos más, hace tiempo se hubiera muerto. O mejor dicho: nunca debió nacer. Aquí, el costo fue una pérdida de espacios para el rock chapín.
Por supuesto, no se puede culpar sólo a los dueños de La Marca por haber contribuido a edificar un negocio que, tarde o temprano, se les iba a venir abajo. También debe cargarse su cuota de culpabilidad a Shakira, Ricky Martin o Cypress Hill por haber incluido este ritmo mediocre en algunos de sus trabajos.
Sin embargo, la extinción de esa fiebre implica un desafío muy fuerte para la comunidad roquera nacional. Hay varios indicios de renacimiento que no pueden pasar inadvertidos. Guate fue el escenario del retorno de Héroes del Silencio, de la inauguración del Rock Ol Vuh, de la Garra o del lanzamiento de Rockfilia, la nueva novela de Jorge Godínez.
En suma, motivos para estar alegres hay de sobra. El perreo fue una torpeza pasajera pero el rock es una cultura; tanto es así, que hay posibilidades de otorgale el Nobel de Literatura a Dylan.
Ojalá que nuestros músicos hayan aprendido la lección; que trabajen duro para recuperar el sitio que en otros países se mantuvo inalterable pese al plástico reggaetonero y, con firmeza, se encaminen hacia una nueva oleada de rock nacional. Como dijeron una vez los Aluxes: “Estamos vivos”.


Tomado textualmente de http://sigloxxi.com/index.php?link=opinion&opinionid=3267